Llego en febrero, con unos pocos partidos jugados durante la temporada. Pero con su trabajo y calidad, se hizo un hueco en el equipo. Quién no recuerda ese gol frente al Cubillas, que nos mantenía vivos para luchas por el ascenso.
Garra e implicación definen a este almeringlish que se ha ganado el cariño de la afición, y de todo el club. Puro ADN Poli. 11 partidos, 10 de ellos como titular, fueron suficientes para ganarse la renovación. Cumplirá su segunda temporada de rojiblanco.
¡Let´s go Jay!